Al final, esta mañana me puse a hacer grullas para el proyecto de Makiko... me apetecía hacerlas. Empecé por la del centro, que quedó un poco "chuchurría". Como no me parecía que podría viajar hasta Japón ella sola, me animé a hacerle unas compañeras de viaje, una por cada miembro de mi familia. Así se apoyarán y se echarán "un ala" cuando haga falta.
Hace una eternidad, cuando estaba en la escuela leí "Sadako quiere vivir"... hoy la tuve presente una vez más.
Para Japón.
Un Besuco.